
Emilio Fernando Rojas R
Fotografía terapéutica
El estudio de la fototerapia nace a partir de la indagación acerca de las distintas problemáticas existencialistas ligadas a las diferentes emociones del sentir en el transcurso del tiempo, que desenvuelven manifiestos de alegría, excitación, provocación e impacto como también falta de autoestima, aceptación, liberación, reconocimiento y demás con las que todos los seres humanos nos enfrentamos todo el tiempo normalmente.
El trabajo que propongo y desarrollo con cada uno de mis clientes está basado en el autorreconocimiento corporal a partir de dinámicas o juegos propuestos por mi parte para la desconexión de rutinas cotidianas. El objetivo principal está basado en conseguir que cada inividuo fotografíado descubra en sí mismo nuevas visiones de su propio cuerpo, siendo más conciente de sus características, esto ligado a poder enseñar lo que nos hace únicos, nuestra esencia. Buscando llegar al desnudo (si bien se desea), por medio de la exploración entre gestos y movimientos que se articulan con el sonido; todo el trabajo está acompañado por música y no cualquier música, además de técnicas particulares donde tanto fotógrafo como modelo rompemos con las barreras de miedo para convertirnos en cómplices de la emancipación.
En un sentido intangible de la fototerapia, la puesta final de una o varias sesiones está a mi responsabilidad enseñando que adicional al producto que es la fotografía en sí, se indague ante la reflexión de cada sujeto al analizar cual es su propio proceso y qué resultados puede obtener a partir de él. Así como puede dar solución a diferentes tipos de conflictos psicológicos internos, también puede ser sólo un medio de distracción o reencuentro natural en un espacio agradable, que unido a la imagen nos enseña formas de comunicarnos con nosotros mismos dejando que cada foto hable sola.











